BRIEGO TIEMPO Crianza 2021

Descripción

Briego Tiempo Crianza es un tinto Ribera del Duero elaborado por Bodegas Briego procedente del corazón de la D.O., concretamente del viñedo «Las Solanas», situado cercano a la localidad de Peñafiel. El Briego Tiempo Crianza, tras permanecer 14 meses en barricas de roble francés y americano, nos encontramos con un vino de aromas potentes e intensos y con un paladar que conjuga contundencia con finura y delicadeza, con toques de fruta negra, cacao y chocolate.
Briego Tiempo Crianza es un vino ideal para acompañar caza, asados y carnes rojas.

CARACTERÍSTICAS

Añada:

2021

Viñedos:

Vino procedente del viñedo Solanas.

Crianza:

14 meses en barrica de roble francés y americano

CONSUMO

Temperatura de servicio:

16º-17ºC

Con qué acompañar:

Vino ideal para acompañar caza, asados y carnes rojas.

NOTA DE CATA

Fase Visual

Color rojo intenso, tonos tejas profundos con leve cardenalicio en ribete de copa.

Fase Olfativa

En nariz, seductor perfume entremezclado de humo de madera con frutos negros como la ciruela y la cereza picota. Recuerdos a balsámicos frescos.

Fase Gustativa

En boca,  gran concentración de frutos negros con recuerdos claros a grosellas, arándanos y endrinas. Notas especiadas con claros recuerdos a vainillas y canela. Amplio en el paladar con un paso fino y elegante.

La Bodega

BODEGAS BRIEGO

Bodegas Briego fue fundada por tres hermanos, los Benito Hernando: Gaspar, Fernando y Javier. De los 3 Briego, Fernando es el enólogo. Él se encarga de elaborar los vinos. Mientras que Gaspar y Javier se reparten el campo. Que no es poco.
Los Briego cuentan con 77 hectáreas de viñedo propio, todo Tinta Fina, todo en Valladolid, en el pequeño pueblo de Fompedraza. En esta zona de la Ribera del Duero, las altitudes pueden llegar hasta 900 metros. Eso significa que, aunque el verano sea caluroso, por la noche refresca y, vaya si refresca, con temperaturas que pueden caer hasta 20ºC fácilmente. Así se pasa de tener 25-28ºC durante el día a llegar a 5-8ºC por la noche. Estos cambios bruscos, hacen que la madurez sea muy muy lenta y que la materia colorante y los taninos no se destruyan por el calor, con lo que la uva tiene mucha estructura. Pero además, ese clima seco y la ausencia de calor prolongado evita que la planta tenga enfermedades y por eso en esta zona de Ribera del Duero se puede vendimiar tan tarde una uva sana y sin enfermedades.
La bodega no es un alarde arquitectónico, ni falta que le hace, porque es cómoda, sencilla y muy limpia. Que al fin y al cabo es lo que importa. Las bodegas no hacen para enseñar sino para trabajar en ellas y de eso, y no de las visitas, dependen los vinos.
Briego cuenta con todo lo que se necesita para hacer grandes, grandísimos vinos: depósitos de acero inoxidable, una nave de barricas bien acondicionada y material pensado para respetar la uva. Con estas sencillas normas trabajan en Briego, haciendo vinos que representan ese espíritu de la Ribera del Duero que se basa en el frescor y en la elegancia más que en la rudeza y la tosquedad.